La Idea Original
- M. A. A. Serrano
- 29 abr 2020
- 14 Min. de lectura

Me dice que es imposible predecir el futuro y yo le digo: ¿pero se puede excitar el pensamiento para desfasar el futuro personal? ¿Y qué tal desviarlo para cambiar la historia personal, el pasado? La historia personal, subjetiva, sería como esa versión de los hechos, creando recuerdos que, como nadie presenció, pues nadie los refutó, y la persona terminó creyéndolos para su vida, haciéndolos más vívidos, incluso empezando a recordar sensaciones que no existieron ¿o sí? Y entonces el autor me mira fijamente con esa idea dizque original en la cabeza y empieza a tomar nota para que no se le olvide, pero deja por fuera algunas cosas, por descuidado. —Una idea así, tan difícil de creer por las leyes que nos gobiernan, solo podría subsistir estando atada a las mismas —me comenta sin tumbar ninguna pared. La idea para cualquiera determina algo de su futuro, su presente o su pasado; es solo influenciada por la visión de la realidad que hemos medido y calculado a lo largo de la historia, que a su vez se ve influenciada por toda la farra cósmica de alguna forma, y a mí no me dejen fuera de esa fiesta, háganme la fa bemol, está profetizada y todo, hasta en la afinación estándar. Si se deja de prestar atención a esa idea se vuelve a lo establecido, a continuar siendo parte de un sistema y a tender a lo que este sistema tienda ¿no? ¿A qué se parece el comportamiento de una idea? ¿Dónde está la idea en el universo? ¿Y sus papás? ¿Mamás? ¿Abuelos a la menos veintitantos? ¿Qué se hicieron? Y el bobo me dice que no hable bobadas, que lo ayude mas bien.
¿En el azar? Insisto. Un azar subjetivo para cada cachivache como nosotros, determinado por las condiciones del universo que nos gobierna y con un azar más grandulón de dirigente. Un azar para gobernarlos a todos, un azar para atraerlos a todos y atarlos en las tinieblas… o… ¿en la luz? ya se me olvidó. Nosotros le pagamos por esa información del azar con más información que es… ¿más azar? ¿Cuánto cuesta el azar a favor? ¿Cuánto en contra? Ya se me escapó de nuevo el azar en un instante determinado de tiempo, amarrémosle con una fórmula, una canción, un dibujo o un libro —Es que cada cabeza es un mundo —dice el autor entretenido en quién sabe qué sin prestarme atención.
Está creando su historia desde cero. Empieza por el protagonista, en el cual no va a evitar imprimir algo de su propia personalidad (misma gobernada por todo lo que lo rodea y gobierna a todo nivel; sociológico, político, histórico, biológico, corporal, químico, físico, etc…), ahora sigue con el pueblo donde vive, si quiere le pone nombre si no no, si quiere le pone país, lo pone en el planeta tierra, o lo pone en otro planeta, si quiere en la misma galaxia, si no en un mundo paralelo, si quiere lo llama mundo paralelo, si no lo llama cielo, lo llama infierno, lo llama cosmos, lo llama ki, lo llama chi, lo llama Tierra 123242353, lo llama Alderán, lo llama Ciudadano AAAAAAAAAAA, lo llama Titán, lo llama La Matrix, lo llama Narnia, lo llama Colombia, España, China, EEUU, Rusia, Corea, hace que Bogotá sea puro monte donde hayan gringos hablando ñero santandereano si se le da la gana, si quiere describe todo o solo lo nomina, lo deja implícito, a interpretación, si quiere hace que la historia sea una sola conversación, un ensayo científico, una crítica, una descripción, un monólogo interno, cualquier idea desarrollada en 200 páginas o en 200 años, ya ni siquiera tiene que respetar las leyes de la física, hace lo que quiere, dibuja y detalla lo mejor que pueda, un sueño, este voló, ese atravesó la pared, aquel está en dos lugares al tiempo, aquella es más bonita, es una mujer, se viste mejor, huele mejor, anda mejor, huele a algo que nunca ha olido pero podría describirlo como mágico, es una entidad femenina pero se comporta de manera desconocida porque el autor dice que es desconocido y ya, huele a magia mezclada con religión, pero el autor nunca olió ni la magia ni la religión como para comparar, entonces ahora decide que huele a lo que el lector esté oliendo en el instante que lee esto, entonces va y mira quién es el que está leyendo y ve que hay una manzana al lado con un gusano y procede a describir el olor en función de la manzana pero olvida al gusano que es un animal como él, en esa función la manzana huele tanto que se puede reconocer el aroma desde el otro lado del cuarto pero no a mitad de recorrido, donde está esa silueta oscura, aunque lo indescriptible al final no pudo describirlo ni él ni nadie de los que estaban presentes o ausentes, porque era indescriptible, pero de pronto se le ocurre algo que le vaya a dar dinero… todo un universo infinito de ideas ¿o no? ¿Qué condiciona las ideas? Aspectos de su personalidad, rasgos e incluso sus propios demonios se van a mezclar irremediablemente con la personalidad del protagonista o los demás personajes, o incluso en las imágenes que describa, en la misma física que gobierna su universo, la historia evoluciona dependiendo de la complejidad de la mente del autor, de la extensión de su vocabulario con la base de la academia durante su vida y todo lo que pueda imaginar a detalle influirá en la precisión del registro, o registrar a detalle, o registrar en la mente, o detallar en la imagen, o mentalizar en un registro, o todo y nada a la vez. —Sí.
Ahora imaginemos cada fracción de esa historia moviéndose en el tiempo, el tiempo que transcurre ahí no es el mismo de la realidad —obviamente—. Resulta que el autor terminó su primer libro de una saga de 4 libros, y el primer libro le tomó 10 años terminarlo porque debía establecer leyes muy complejas en un universo muy complejo (como El Señor de los Anillos, o GOT), sin embargo, para los personajes del libro solo pasó 1 año, y al autor le parecieron 20, toda una vida para terminar de escribirlo. Además, para todo lector (con un mínimo de comprensión), los personajes habrían vivido solo un año, no importa cuántas veces lo lean, sólo habrá transcurrido un año para los personajes en cada lectura. Una cosa más: dependiendo del tipo de lector, va a tardar más o menos tiempo en concretar la lectura de la obra y esto también afectará la comprensión de ella, pero al final probablemente lea mejor, la próxima lectura será más rápida y comprensible ¿no? Y me responde que no diga bobadas, pero igual va anotando todos los datos…
Volviendo al canon: con un 80% del segundo libro de su saga, lleva unos 4 años desde el primero y nada que se le ocurre un buen final, y se sigue y se sigue estancando, mira una crítica en las noticias de su primer libro y, decepcionado porque pareciera que todos lo entendieron mal y le dieron durísimo, decide corregir los “errores” del primero. —¿Cuáles errores? ¡Nada! Voy a seguir como iba— se dice y me dice rompiendo la pared, la vez pasada no había hecho eso. Se pone de altanero conmigo porque en ese punto se encuentra un bloqueo mental con los personajes y me lo proyecta, porque tal vez su desarrollo no tenía mucho sentido con la idea original, porque pensaba que sus personalidades eran de cierto modo, pero fue más fácil describirlas de otro y hasta los mismos personajes se negaban a obedecerlo en su historia —¿Cómo me va a poner a hacer eso? ¿Se embobó? —le reclamaban recordándole cosas de su misma historia como si supieran más ellos de ellos que el mismo autor, todos arribistas. Todo afectó la idea original, piensa: —Pues yo soy el autor y que se jodan todos— y concluye el segundo volumen con un deus ex machina descaradísimo solo para ajustar su primera visión y desafiar al público. Tan descarado que él mismo se dio cuenta, pero no le importó.
Sale la crítica, y fue lo mejor que pudo haber escrito, ¡Best-Seller! Que la película del primer libro, que la serie de Netflix, que ahora guionista de cine y dizque filósofo, que la biografía del autor, que la fama, suena O Fortuna Imperatrix Mundi, suena “dinero, dinero, dinero aprende algo dinero” y agobiado por muchos sentimientos descubiertos o creados por tanta cosa, ahora no tiene idea de cómo continuar ni con la saga ni con los sentimientos ni con el tiempo. Vino a medirse las emociones conmigo en un instante de tiempo, y yo le dije cuando vi las complicadísimas funciones que describían: ¿por qué la ansiedad? ¿Vamos bien no? ¿Es porque lo juzgaron duro con el primero? —Sí —responde— está jodido complacerlos a todos porque nadie me complace a mí—. Todo bien que yo creo en usted, a ver, miremos la historia… El protagonista vence a la muerte al final dizque porque despertó el poder del amor de la nada… Ush… Sí está re-pailas, sobre todo ese “de la nada”. Pues a ver, si ya tiene eso, ya no se eche para atrás, pues El Amor con toda, pero no de la nada, bruto pero decidido como aprendí en los exámenes de Solfeo, Armonía, Dispositivos Electrónicos y en la primera llamada de Nesting en el Call Center, con toda con los impulsos neuronales, que se revolucione ese encéfalo, complejícelo, pero cuidado se le vuelve odio, le digo. Métale otro deus más descarado, le dice otro. Eso ya déjelo así y empiece otra, le dice el hermano. Eso no va a dar plata, le dice el papá, lo mismo que le había dicho del primer libro. Eso está muy bonito mijo, le dice la mamá mientras el autor ve que le trae comida y le dice que no trasnoche, todo en un evento evocado para satisfacción personal. Está genial, dijo el mejor amigo a casi todo lo que le mostraba. Hay un complot del malo con la novia del protagonista, dijo YouTube en miles de videos y por lo menos yo me lo creí hasta cierto punto. Hay algo que aún no sabemos, dijo Twitter, pero ese trino ni lo escuché. —Es que el protagonista tiene una vida pasada que le transmitió esa información en ese momento porque en su vida anterior murió por lo mismo y esto activó su conciencia compartida —recordó o se inventó ahí medio justificándose. La cosa es que estaba como chévere la idea, pero no tenía nada que ver con la que venía desarrollando, cada vez se alejaba más de esa primera visión de la historia, hasta el punto de cambiar por completo el primer final planteado.
Sale el tercer libro más complejo que el segundo y todo el mundo se llena de expectativa por saber el final, porque parecía que el protagonista estaba ideando un plan desde su vida pasada hacia sus vidas futuras y la cosa se complicó tanto con la cuestión del amor que salió un volumen bien gordo. Igual: que Best-Seller, que Película, que nueva temporada en Netflix, y la película nominada a los óscares, las catalinas y los canes. Al final de esta entrega se polarizó su público: aunque la gran mayoría estaba a favor del bueno de la historia, los más quisquillosos se debatían entre quién era el malo y quién no. Twitter seguía diciendo que había algo que no sabíamos, los youtubers sacaban videos de conspiraciones que parecían encajar perfectamente con todos los cálculos matemáticos sobre el futuro, las noticias se paraban cada vez que iba a salir una película nueva, la gente se cogía a trompadas por los spoilers, se polarizó la opinión respecto a casi todo, todo el mundo pedía a gritos la 4ta entrega que fue la que más se demoró entre película y película, hubo guerras, calamidades, desastres naturales, hambruna, pánico, enfermedades locas, cuarentenas y hasta nuevas lenguas en todo ese tiempo porque nada que salía. Había que concluir de una vez por todas esa agónica espera que duró tan solo 5 años, pero que a la audiencia le parecieron como diez millones, ya veían a sus hijos grandes y todo y nada que salía —la película, porque el libro ya había salido hacía milenios, me estoy leyendo la saga completa ahorita que me llego a la velocidad de la luz por cuestiones del azar.
Finalmente se publica la conclusión, La Venganza del Malo Vol I y II para compensar la espera: dos monstruosidades complejísimas de tantas páginas cada uno, como La Santa Biblia y Danza de Dragones dicen tener. Difíciles de entender como El Putas si no tuviese pipí, o como lo indescriptible que no se puede describir dijo el bobo, pero no el autor, ese se vuelve menos bobo cada vez que vuelve a leer. Y al parecer nadie había entendido porque yo le pregunté a todos y todos me decían una vuelta distinta: que los dos volúmenes eran la misma historia, pero contada distinto, que no terminaba de explicar todo, que si lo uno, que si lo otro, refute y refute sin entender, quejas, quejas y más quejas en general. Dizque al final sí era el bueno el malo y el malo el bueno, y otros que no, que, al revés, y nadie se enteraba de nada, algunos ni se habían leído los libros, la gran mayoría había llegado a la mitad de ambos porque de la ansiedad los habían empezado a la vez sin darse cuenta y luego no fueron capaces, uno que otro metía la cucharada sin tener ni idea solo porque quería popularidad, ni modo.
Luego como que todos empezaron a pensar que el autor los había tenido en cuenta para la construcción de los personajes, porque todos se vieron identificados y crearon hasta sectas de culto hacia los libros y los personajes, la carrera de los actores se catapultó, hicieron un videojuego de mundo abierto que nadie compró, que la fuente de inspiración, que el libro que explica el libro, que el libro que desmiente al libro que explica el libro, que el libro que trata de conciliar todos los libros sobre la película en un recontra libro, que el remake, que el reboot, que la parodia, que el universo extendido, que las franquicias, por allá en Bucaramanga un loco se inspiró y compuso un álbum de Death Metal Melódico Sinfónico Técnico-Experimental Conceptual Satánico basándose en la lucha interna del protagonista y su comparación con la lucha de los egos que gobiernan otros egos, otro loco, uno de la calle, acá a la esquina empezó a hablar de universos paralelos con magia y esoterismo, y dizque con técnicas ocultas dentro de la historia para caminar por el agua y revivir muertos porque supuestamente se aproximaba el apocalipsis; a ambos locos los suprimieron por locos y solo en estos párrafos se podrán revivir porque ya nadie los recuerda… Pero todo lo anterior, son cuestiones del futuro de este canon que puede o no que pasen, ahorita estamos en el presente y hay que esperar el futuro y olvidar el pasado para ser felices como me recomendaron el otro día, la fórmula de la felicidad del siglo XXI.
El autor no se la pasaba mucho en redes mientras escribía su saga, sin embargo, los viernes en la noche, en la soledad de una culpa que lo inquietaba, revisaba las ideas de sus lectores para avanzar cuando se veía bloqueado, obviamente él decidía. Al final la mezcolanza de información fue tal, que pocos descifraron el verdadero secreto del giro final a pesar de que entre muchos lo habían propuesto, y como no entendieron se quedaron callados, no opinaron, algunos dijeron que habían entendido, pero no explicaban y el que explicaba, explicaba mal, como los sabiondos, asintiendo a todo lo que quiera confirmar el otro, hasta a la crítica profesional no se le ocurrió qué decir, pero le puso 5.0/5.0 la nota máxima, con una justificación igual de confusa que ni el autor ni yo ni nadie entendimos. —Es que lo compliqué mucho, creo que las cagué —dijo después cuando vio una nueva ola de críticas y la opinión más polarizada que nunca, o lo odiaban o lo amaban o ninguna, pero todas las fuerzas se cancelaban todos los días, y a veces no, hasta que se cancelaron para siempre cuando salió una nueva saga de otro autor que también conocí, (El Sociable me dicen) pero el bobo de la historia que estamos leyendo, el que también creo que la anda escribiendo, todavía seguía sufriendo por el pasado. Pero yo lo veía como medio feliz, y lo digo, porque yo lo conozco más o menos, cuando me queda tiempo por el trabajo, y pues él decía que estaba feliz, y yo lo veía feliz, o no sé, en fin. La gente también lo vio feliz, o no sé. La familia también, bueno. Tenía dinero suficiente para vivir generaciones infinitas, las que a él se le ocurrieran, o todas a la vez, o ninguna, o no vivir, quedarse mirando, o quedarse leyendo, o calculando, o meditando, o cantando, o aprender otra cosa, o no hacer nada, dejar de respirar, tele-transportarse, poderes, y yo entonces meto la cucharada y le digo que nada de eso existe, que no sea tonto, que ni fantasmas ni espíritus ni Zeus ni Júpiter, método científico, ensayo y error, introspección, mediciones reales, datos relevantes, fórmulas matemáticas, funciones, cálculo, gravedad, entropía, principio de superposición, modelo estándar, teoría cuántica, relatividad general, geología, arqueología, paleología, astronomía, cosmología, historia, psicología, política, psicometría, lingüística, filología, fisiología, campos semánticos, axiomas, neurología, genética, leyes, teoremas, filosofía, artes, música ¡mucha música!, análisis termo-psíquico-químico-técnico-estructurales de las funciones primigenias del universo imaginario-real-ficticio-científico-ambulatorio-nihilista del empíreo infinito que se acaba cuando se desordena, que nada de eso lo iba a comprar el dinero que todavía seguía llegándole del primer libro, y que se iba a morir sin lograr su sueño de combatir virus y plagas cósmicas, así de hijueputa me le puse.
Y llega el futuro y lo que conté arriba de las sectas de culto y la franquicia siempre y sí sucede, y este bobo sigue deprimido. Y me empieza a sacar la piedra que se la tiro en la cabeza desde atrás, desde donde estoy y desde todos los lados a la vez le tiro piedras, y me canso y me voy a dormir. Paro por algunos años porque pobrecito, está en “duelo existencial”, pero vuelvo y me quedo mirándolo un rato de frente y sigue igual, entonces retorno a la iluminación beligerante, pero esta vez desde la pura vanguardia; le tiro una roca enorme, lo aplasto con ella, invoco una avalancha de estiércol, de heces, de podredumbre, de lixiviado, un mar, que se asfixie en caca de vaca y polución, le pego un virus chino para rematar, lo machaco en todas las líneas rítmicas y melódicas, lo dibujo de mil maneras en las que podría morirse, le armo guerra antes y después de la era cristiana, de la era romana, de la edad de piedra, del bronce, del hierro, del mithril y del vidragón, lo elimino de las redes sociales y hasta de donde no exista, con toda coordenada posible, con todo algoritmo posible, con todo concepto posible, en todas las épocas posibles, pero lo dejo vivo, a ver si no va a dejar la pendejada teniendo todo ese montón de dinero para hacer lo que quiera. Ya quisiera yo o el otro tenerlo, o ella, o nosotros o vosotros o ellos o todos los pronombres habidos y por haber, ¿y qué? A todos nos pastorean por igual, que no llore. —Ellos y los otros pronombres no existen —me dijo ahí como para seguir peleándome. Claro… sí… ya me acordé de eso también… pero le corregí que Ellos sí existían y los Otros son indescriptibles, como los niños hambrientos de Africa con los que me persuadían para tomarme la sopa y le quedó sonando, pero muy pasito.
Entonces el autor se distanció de todos hasta que dejó de existir, y para él dejó de existir el mundo, como cuando yo me concentro mucho en una idea y se me va todo lo demás, a él también le pasa. Y empezó a cuestionarse el porqué de lo que ya sabía pero que se hacía el huevón. Y calculó una negligencia enorme, pero midió poquita, y cuando calculó poquita a veces midió bastante porque el universo andaba de exigente o negligente también ¿Por qué no? De vez en cuando a cualquier cosa le da el boom del perreo intenso y allá Word le subrayará la palabra de perreo para que la corrija de inmediato. Que eso no sale en la RAE mano, me dice Word en un fingido acento santandereano para recordarme la tierrita, que no sea tan reggaetonero mano. Pero la cosa fue que el autor se levantó por alguna u otra razón que, hasta el día de ayer, hoy más seguro, y tal vez mañana ya no, no sabría decir por qué. —Nada de eso —me interrumpe el altanero tumbando con dinamita la dieciseisava pared y va y se echa al hedonismo y a la concupiscencia…
Se acordó de los agujeros negros y los hizo más grandes, se acercó dizque para estudiarlos, pero se volvió un borracho drogadicto y vago, y empezó a tirarse las piedras él mismo haciendo que me uniera a la lapidación en algunas ocasiones. Me dice que él lo deja cuando quiera, pero yo sé y sé que él sabe que está procrastinando porque nos volvimos nihilistas ahora, masoquistas, voyeristas y escupideros. Yo voy a hacerle terapia de vez en cuando como para no ser negligente por mi parte, pero me quedo en el agujero negro un rato, y unos amigos también se quedan ahí como un par de pendejos esperando, a la novia que está con otro me imagino. Pero luego por compasión vuelvo a terapiarlo y nada, vuelvo a mi agujero que ya tenía nuevos miembros y me hablaban dizque de un gusano que olía a manzanas, vuelvo donde el autor y ya está como más tranquilo, menos mal porque a mis compañeros ya se les empezaba a correr la teja. Me encuentro al autor ahí sentado echando cabeza en el escritorio como siempre, estancado en su historia, siendo un ladrillo más en esa pared que tanto tumba y vuelve a construir, pelota de los azares, calculando niveles de negligencia y comparando los resultados con lo que medimos qué días para aprender de sus errores viene otra vez en busca de ayuda, pero él ya se había ayudado: —¿aquí es donde está el giro de la historia verdad? — y yo le confirmo, que mire para arriba de esta lectura, que recuerde la idea original…
#LaIdeaOriginal #ConcienciaYUniverso #FisicaTeorica #Cuento #Artes #Música #Literatura #ModelosMatematicos #Historia #Cultura #Moda #Cine #CamposSemanticos #ElAzar
Comments